Son magdalenas, son muffins. Bueno, a ver, ¿que son?.
En mi humilde opinión la diferencia está básicamente en la masa sin entrar en los ingredientes y proporciones ya que el muffin siempre lleva más harina en proporción a los demás ingredientes y menos huevos, si no, sólo hablando del tipo de masa de cada uno.
La masa de la magdalena se obtiene esponjosa por el batido al que se someten los huevos o yemas con el azúcar y añadido de claras a punto de nieve y así obtenemos la masa esponjosa y aireada que todos sabemos.
En cambio la masa de el muffin se trata de trabajarla lo menos posible para así obtenerla compacta y húmeda.
Una magdalena es esponjosa y suave al paladar. Podría decirse que casi se desintegra en la boca; y el muffin es una masa densa, húmeda como una pasta. Cada una delicioso a su manera.
Ingredientes:
- 125gr de mantequilla derretida
- 375gr de harina con levadura incorporada, o de repostería más 1 sobre levadura Royal
- 3 cucharadas de cacao puro en polvo
- 175gr de azúcar blanquilla
- 2 huevos
- 125gr de chips de chocolate
- 250ml de leche entera
Preparación:
Precalentamos el horno a 190º posición arriba y abajo.
En un cuenco mezclamos la mantequilla, la leche, los huevos y el azúcar y batimos hasta conseguir homegeneidad.
En otro cuenco la harina tamizada, el cacao y el azúcar.
Añadimos al último cuenco la mezcla de líquidos que teníamos y removemos con una cuchara de madera suavemente hasta que se integren.
Por último las pepitas de chocolate.
No debemos batir la masa ni removerla demasiado. Que esté mezclada con el mínimo de vueltas posible.
Untamos la placa de muffins y rellenamos con la masa tres cuartas partes.
Si no disponéis de bandeja, simplemente en los papeles de magdalenas habituales salen perfectamente.
Para un mejor resultado metiendo el papel dentro de moldecitos flaneras de albal que venden, hacen que suban mucho mejor quedando de esta forma con el típico moño de mangdalenas.
Ponemos el horno con calor sólo abajo y horneamos durante 15′.Pasados éstos cambiamos a la posición calor arriba-abajo y horneamos 5′ más.
Sacamos del horno y dejamos reposar en la bandeja, o moldes, entre 5-10 minutos.
Transcurrido ese tiempo dejamos enfriar sobre la rejilla.
Duran varios días perfectos en una lata hermética.
